jueves, 3 de octubre de 2013

Las uñas, el alivio.





 Pesan los dedos

las uñas

la sangre,

 el alivio

 

la seriedad de una vida

de una vida   que   ha  quedado a merced de la Mar

 

 Se ha incubado la delicia

 

Menesterosos los que pasan sonrientes ante sus días sin mirar al prójimo quebrantado.

Feliz la mentira que duerme cerca de tu cama

 

pesan los dedos

las uñas

la sangre,

 el alivio

 

Dichoso el agobio de no darse por vencido

 se hospeda

 en el frescor del césped.

 

En las estrellas quedan sus ramas

los recuerdos,

en penumbra florece en abundancia

 la soledad resistente,

tan incapaz de justifica malestar

 

pesan los dedos

las uñas

la sangre,

 el alivio

 

la encara, la adorna

sin dejar de oler las pestes

 sin dejar de nombrar las flores

 sin dejar

 ni callar

 

eres como el poeta al que acuden  las sedientas almas

que de vez en cuando anticipadas vienen a dejarte palabras sin fonética

 sin color

 

pesan los dedos

las uñas

la sangre,

 el alivio

 

Diana Rosas Castro.

Octubre 3, del 2013.
 
 


Auguste Rodin.